viernes, 5 de diciembre de 2014
Anoche te esperé
te esperé tanto, que hasta creí que no vendrías,
pero al fin llegaste.
Apareciste con cierta timidez, como una princesa vergonzosa.
Inmensa y resplandeciente asomaste en el horizonte,
Sonreí al verte, iluminaste mi rostro,
viniste a verme a mi, te estaba esperando,
te hiciste rogar, pero al fin llegaste
y ahí posaste para mi, solo para mi
estabas tan linda...
Te miré, te observé como nunca antes lo había hecho
y supe que esa noche saliste para mi, solo para mi.
Y por un instante mi soledad se esfumó y sentí
que el amor llamaba a mi puerta...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario