Cuando llega el despertar, y el cielo se tiñe de naranjas, rojos y amarillos, mi corazón se acelera y me saca de la cama como si mi descanso hubiese sido sublime.
Es que presiento, que en ese amanecer de colores maravillosos, viene un mensaje, tu mensaje, el del amor inconsciente, el del amor insoslayable, el del amor loco y desesperado.
Amanece, amor, amanecen nuestras vidas.
La tempestad no es eterna, al igual que la calma; por eso, tomemos conciencia, hagámoslo, sí, con esa furia que solo puede dar el fuego intenso de una hoguera que fue encendida con la pasión que nuestros cuerpos generan, el calor del deseo, para soportar los fríos mas intensos.
Transpirados bajo cero ... .
Porque nuestro sexo así lo quiso. Porque la vida viene, se va y no vuelve.
Pero el amor es el combustible necesario.
Siempre vendrás a la surgente, tu vida lo necesita, mi ser lo necesita, mis pulmones, mis piernas, mis ojos lo necesita, y yo estoy aquí proveyéndotelo, para que nuestros corazones sigan latiendo amor!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario